Gustavo Cortez y Cindy Hernández fueron condenados a 30 años de prisión, por haber matado a una mujer tras una fiesta en la que departían con la víctima. Con pruebas suficientes, la Fiscalía comprobó en un juicio que ambos imputados fueron los responsables del crimen cometido en el cinco de marzo de 2020.
La víctima se encontraba departiendo en un establecimiento a la altura de la carreta que conduce al Congo, Santa Ana y al convivio llegó Cortez y González. Luego de un rato decidieron moverse al sector de los miradores en el Lago de Coatepeque y seguir la fiesta en ese lugar.
Bien noche, la víctima identificada como Leticia Elizabeth Campos de Ramírez decidió irse a la casa de los imputados; según testigos, hubo discusión por celos entre Cindy y Leticia, por lo que la imputada comenzó a agredir a la otra mujer.
Posteriormente, Gustavo se sumó al pleito y agredió a la víctima hasta que le quitaron la vida con un cuchillo.
De acuerdo a la investigación, los dos procesados intentaron deshacerse del cuerpo y lo arrojaron en la zona de la carretera que conduce de El Congo a Santa Ana, en el kilómetro 54, jurisdicción del cantón Caña Brava de Santa Ana.
La Fiscalía General de la República hizo una exhaustiva investigación y logró individualizar a cada imputado y con basta prueba obtuvo una condena para ambos acusados por el Homicidio Agravado.
El Tribunal Segundo de Sentencia de Santa Ana además de la pena de cárcel impuesta decretó que los imputados deben pagar de $5,000 dólares para la familia de la víctima.