Las condenadas son Eugenia Guadalupe Guerrero Granados y Sandra Yamileth Paz Menjívar y en el juicio, la Fiscalía General de la República demostró la culpabilidad de ambas en los delitos de Abandono y Desamparo de Persona, Maltrato Infantil, Lesiones Agravadas y Lesiones Simples.
Según la investigación, los hechos sucedieron en el municipio y departamento de Santa Ana, en el lugar de residencia que compartían los niños junto a su madre y la compañera de vida de ella.
Mientras ellas se iban a trabajar dejaban a los dos niños encadenados, no les dejaban nada de comer ni de beber.
Según los relatos, a los menores los dejaban así porque no querían que entraran a la casa a desordenar ni a comerles la comida de ellas.
De acuerdo a la investigación, Eugenia Guadalupe los maltrataba por no cumplir sus órdenes.
La situación de maltrato hacia los menores fue de conocimiento de la Policía por medio de una denuncia anónima, y siguiendo el debido proceso se verificaron los hechos y efectivamente, al interior de la vivienda encontraron a los dos niños encadenados, la niña estaba junto a una máquina de coser y el niño cerca de una lavadora en el patio de la casa.