El Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC) ha confirmado que todavía no sabe quién, o quiénes, mataron al cocodrilo que atacó a un niño de ocho años en Matina, Limón, el pasado 30 de octubre.
A eso de las 4:30 p.m. del sábado 26 de noviembre, oficiales de la Fuerza Pública se desplazaron hasta el río Matina en Cuatro Millas luego de recibir una alerta indicando que había un animal desmembrado en la playa del afluente con restos óseos humanos en su interior.
Al parecer, los vecinos del lugar lo abrieron y, al hacerlo, aparentemente encontraron huesos y pelo que podrían pertenecerle al menor que fue atacado por el animal mientras jugaba cerca del río.
“Días después de los hechos fuimos al lugar e hicimos una inspección, vimos los restos que dejaron y se lo informamos al Organismo de Investigación Judicial (OIJ) para interponer la respectiva denuncia. Como funcionarios, esta muerte no la podemos obviar así que actuamos conforme a la Ley de Conservación de Vida Silvestre”, dijo Eduardo Pearson, del SINAC.
Pearson explicó que no pudieron entrevistar a ningún testigo, ya que, cuando llegaron, no vieron a nadie y los vecinos se han mostrado reacios a colaborar con las autoridades.
“La denuncia que interpusimos en el OIJ es contra ignorado porque no conocemos quiénes fueron por lo que ahora le corresponde a la Policía Judicial la situación ya que nosotros hicimos lo que nos concierne.
“Hay un estudio que se hizo sobre la presencia de caimanes y cocodrilos que estamos usando de base para iniciar todo un proceso de educación y advertencia con la población. Hay presencia de estos reptiles en muchos lugares y las personas de la comunidad lo conocen y lo saben. Sin embargo, donde hay muchos es en Matina y se mueven por ríos y canales ya que todo está conectado”, comentó Pearson.
Quien mate o lastime a un animal se expone, si es encontrado culpable, a una multa o a penas de cárcel que van desde uno a tres años.
A la fecha, el OIJ continúa examinando los restos encontrados para confirmar si son humanos, de ser así, como segundo paso se le realizarían exámenes de ADN para conocer si son los del niño.