El asesinato de un agente policial es uno de los muchos delitos por los cuales la Fiscalía General de la República llevó ante los tribunales a 32 miembros de la estructura de la pandilla 18, cuyas zonas de operación eran en los municipios de Santiago de María, Jucuapa, Mercedes Umaña, Tecapán y California, Usulután. A los imputados se les impusieron penas de hasta 305 años de prisión.
A los pandilleros condenados se les atribuye el homicidio de un agente destacado en la policía rural de Jiquilisco, Usulután, quien se desplazaba en motocicleta cuando fue interceptado por varios delincuentes y posteriormente lo asesinaron.
Los delitos por los que fueron procesados los delincuentes, son: Homicidio Agravado, Homicidio Tentado, Organizaciones Terroristas, Extorsión Agravada, Hurto y Robo Agravado.
Dentro de los pandilleros que recibieron la mayor cantidad de años de prisión, están: Manuel Higinio Guerrero alias “Pony”, sentenciado a 305 años de prisión por 15 casos, entre ellos homicidios agravados, intento de homicidios, organizaciones terroristas, hurto y robos.
Los otros condenados que tuvieron castigos con altas penas de cárcel son: Santiago de Jesús Fuentes López, alias «Panal», 285 años; Ismael de los Ángeles Salgado Campos, 209 años; José Gustavo Urquilla Bonilla, alias «Snyper», 90 años; Pilander Mauricio Cruz Sorto, alias «Chino Guara», 90 años; Miguel Ángel Interiano Medina y Nelson Omar Cortez Vigil, 50 años de cárcel cada uno.
Los otros condenados deberán purgar penas que van desde los 29 hasta los 10 años de cárcel. El proceso se realizó ante el Juzgado Especializado de Sentencia de San Miguel, y al cual, los fiscales del caso presentaron abudantes pruebas que evidenciaban la participación de estos sujetos en los delitos.
