El Gobierno del Presidente Nayib Bukele sigue trabajando por el desarrollo integral de la niñez y la juventud salvadoreña; es por ello, comparte con otros países de la región la estrategia implementada para cumplir con este importante objetivo.
El director y la subdirectora de Reconstrucción del Tejido Social, Carlos Marroquín y Ana Martínez, recorrieron junto con la delegación peruana de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (DEVIDA) diferentes puntos como parte de la semana de intercambio de experiencias con Perú.
“Seguimos mostrando los proyectos emblemáticos que se ven desde la fase 2 del Plan Control Territorial. Uno de los proyectos más emblemáticos para el Presidente Bukele es el tema de fortalecer a las juventudes”, Indicó Marroquín.
Uno de los lugares visitados fue el Centro Integral de Inteligencia Emocional, el cual trabaja en la prevención de problemas emocionales con ayuda de la psicología clínica y comunitaria; cuenta con diferentes áreas: centro de cómputo, un área de descanso, biblioteca, videojuegos y dos consultorios.
Marroquín enfatizó que la salud mental se conecta con la prevención de la violencia y que los gobiernos anteriores no quisieron invertir en la salud mental de ningún sector poblacional, algo que está cambiando con los programas implementados por el Presidente Bukele.
Los funcionarios de Tejido Social compartieron las acciones implementadas en el marco de la fase 2 del Plan Control Territorial, denominada Oportunidades. “Buscamos tomar las experiencias exitosas que han tenido como país y llevarlas al Perú. El objetivo sobre todo es mirar a las personas que se encuentran en situación vulnerable y cómo, a través de diversas intervenciones que se pueden hacer en ambos países, mejorar el trabajo que venimos haciendo ambas instituciones”, dijo el especialista en gestión comunal en la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas, Henry Hurtado.
Este recorrido también incluyó la visita al Centro de Integración Comunitaria, en Apopa. El Gobierno del Presidente Bukele sigue trabajando para mejorar la calidad de vida de niños y adolescentes, eliminando la situación de vulnerabilidad por violencia que, por años, administraciones pasaron por alto.