La icónica escultura The Vessel situada en el barrio del Hudson Yards, en el oeste de la isla de Manhattan, podría reabrir al público próximamente al dotarse de una red antisuicidios, tras permanecer sus escalinatas cerradas al público durante un año.
The Vessel es una compleja escalinata en espiral de más de 45 metros de altura diseñada por Thomas Heatherwick como una obra de arte interactiva compuesta por 154 tramos de escalones conectados por 80 rellanos, que los visitantes deben explorar desde dentro para disfrutar de las vistas de Nueva York y del cercano río Hudson.
Sin embargo, desde su inauguración en 2019, se han registrado cuatro casos de suicidios, el último de ellos el de un muchacho de 14 años en julio de 2021, lo que motivó su cierre actual. Desde entonces, el monumento solo puede verse y fotografiarse desde abajo, estando cerrados al público todos sus accesos, donde están apostados guardias de seguridad que impiden la entrada.
El canal local ABC7 señaló este martes que los responsables del monumento ya están probando las nuevas medidas de seguridad que incluyen unas mallas bajo el hueco de las escaleras, y citó a un portavoz del lugar que se limita a confirmar que exploran “nuevas soluciones” que les “permitan reabrir la escalinata”.
En marzo de 2019, cuando se inauguró Hudson Yards, el monumento, que costó unos 200 millones de dólares, se presentó como una de las piezas centrales del que fue descrito como el proyecto urbanístico privado más grande de la historia de Estados Unidos, que supuso una inversión de unos 25 mil millones de dólares.
Los especialistas remarcan que las muertes por suicidio nunca tienen un único detonante, sino que son el resultado de factores psicológicos, biológicos y sociales que tienen tratamiento. Las personas con conductas suicidas y sus allegados tienen a su disposición servicios sanitarios y teléfonos de emergencia donde pueden recibir ayuda.