El Gobierno del Presidente Nayib Bukele continúa dando respuesta oportuna a la diáspora salvadoreña en el desarrollo de diferentes trámites; por esto, ha habilitado nuevas oficinas consulares en Springdale, Arkansas; en Saint Paul, Minnesota; y en las ciudades de Fresno y San Bernardino, en California.
“No me imagino una mejor manera de celebrar los tres años de gestión del Presidente Nayib Bukele que inaugurando un consulado en esta ciudad”, expresó la viceministra de Diáspora y Movilidad Humana, Cindy Mariella Portal.
La funcionaria señaló que, a través de estas representaciones, se estará brindando servicios a más de 167,000 salvadoreños: 40,000, en Springdale; 70,000, en San Bernardino; 35,000, en Fresno; y 22,000 en Saint Paul. Los servicios se brindarán de lunes a viernes, desde las 8:00 a. m. hasta las 4:00 p. m. Con este tipo de acciones, el Gobierno acerca los servicios de apoyo a los compatriotas que están fuera del país, brindando servicios más eficientes y oportunos, sin la necesidad de que tengan que trasladarse a otros estados y ahorrando dinero.
“Hoy tenemos un servicio de citas en línea, a través del sitio: portalcitas.rree.gob.sv, para que nuestra gente no tenga que hacer filas largas o esperas, para recibir sus documentos”, puntualizó. La viceministra indicó que, también pueden solicitar los trámites, programarlo e incluso pagarlo, utilizando la plataforma en internet de la Cancillería: portalcitas.rree.gob.sv; a través del consulado virtual, mediante el WhatsApp: +503-7070-1071 y vía telefónica al 1-888-301-1130.
Entre las gestiones que los compatriotas pueden realizar, en estas oficinas, se encuentran: los relacionados al pasaporte, registros de nacimientos, matrimonios y defunciones; así como antecedentes penales, poderes notariales, solvencias de la Policía Nacional Civil (PNC), registro del estado familiar, poderes, emisión de visas para que extranjeros ingresen al país, entre otros.
Esta es una muestra más del compromiso del Gobierno del Presidente Bukele en favor de la población salvadoreña en el exterior, saldando una deuda histórica, esta vez con la diáspora.
