Entre ellos se encuentra Vladímir Salazar Merino, alias “Dreamer”, un hombre de mediana edad que se ocultaba en una iglesia, haciéndose pasar por pastor, con el fin de no ser descubierto por el Régimen de Excepción.
Así como “Dreamer”, se halla José Alexis Morales, alias “Chepe”, quien movilizaba sustancias ilícitas que financiaban a la pandilla y recogía el dinero obtenido de la extorsión.
Se suma el pandillero Gregorio Alfredo Orellana, conocido como “Alfredo”, quien se dedicaba a comercializar armas y munición para la estructura criminal.
La misma suerte corrió para Luis Ernesto Ramírez, alias “Gallero”, y Francisco Antonio Castillo, alias “Calambre”. Este último se dedicaba a ocultar a los terroristas en sitios donde supuestamente no los hallarían las fuerzas policiales.
La corporación policial reveló que los criminales podrían pasar hasta décadas en la cárcel gracias a las nuevas reformas impulsadas en el Régimen de Excepción, ideado por el Gobierno del Presidente Nayib Bukele, a fin de acabar con la problemática de la criminalidad en el país.
